martes, 7 de noviembre de 2017

Albert Camus y la filosofía de lo absurdo.

"Cualquier hombre, a la vuelta de cualquier esquina, puede experimentar la sensación del absurdo, porque todo es absurdo".

El 7 de noviembre de 1913 nació Albert Camus, filósofo humanista que exploró en lo absurdo de la condición humana. Se sintió extranjero toda su vida y se declaraba anarquista y ateo. Afirmaba que "no creo en Dios, me aburre".

Encontró en la escritura el arma poderosa para defender sus ideas y atacar movimientos como el nazismo. Debido a la tuberculosis que sufría desde los 10 años no pudo entrar en el ejército, pero su talento como escritor le llevó a ser editor del periódico Combat y a poder pelear con la palabra, defendiendo siempre a  los oprimidos y a los rebeldes.
Empezó a ser conocido a raíz de la publicación de su obra "El extranjero", un fiel reflejo de la existencia del hombre moderno,  partiendo del absurdo como condición existencial primaria y destino ineludible del protagonista.

Más de una vez llegó a plantearse el suicidio, pero el miedo no le dejó llevarlo a cabo. En su ensayo "El mito de sísifo", Camus discute la cuestión del suicidio y el significado de la vida, presentando el mito de Sísifo como metáfora del esfuerzo inútil e incesante del hombre.

Fue amigo de Pablo Picasso, Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir, quienes le acogieron durante su estancia en París en la época convulsa de la segunda guerra mundial. Pero terminó peleándose con Sartre a raíz de la publicación de su obra "El hombre rebelde" en la que Camus criticaba el régimen Stalinista y lo comparara con el Nazismo, afirmando que, de la misma manera que se criticaban las atrocidades del nazismo, también eran criticables las atrocidades del régimen comunista de Stalin. Estas afirmaciones lo convirtieron como en enemigo de Sartre y de todos los intelectuales de izquierda.

A pesar de ello, no dejó nunca de luchar contra todas las ideologías y las abstracciones que alejan al hombre de lo humano, definiéndolo como "la filosofía del absurdo".

Murió el 4 de enero de 1960 en un accidente de coche. Paradójicamente, unos días antes había afirmado «No conozco nada más idiota que morir en un accidente de auto», en referencia a la pérdida de Fausto Coppi. Cuando el coche que conducía su amigo Michel Gallimard se salió de la carretera y chocó contra un árbol, Camus llevaba consigo un maletín con varios documentos, cuadernos y un manuscrito de 144 páginas.

Tres años antes había alcanzado la gloria de las letras con el Nobel.

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